El Ayuntamiento de Adeje y la EMSA forman en protección de la infancia a sus monitores deportivos

El Ayuntamiento y la Empresa Municipal de Servicios de Adeje (EMSA) dan un paso más en su compromiso con la protección de la infancia, haciéndola efectiva con medidas que alcanzarán a más de 3.000 menores vinculados de forma directa a actividades municipales. Durante la mañana del pasado viernes 28 de noviembre el Pabellón de Las Torres acogió la presentación del Protocolo de Actuación para la Protección de la Infancia y la Adolescencia en el Deporte y en el Ocio, una detallada hoja de ruta para generar, dentro del marco competencial municipal, los entornos y las condiciones más seguras para menores y jóvenes.

Con ello, Adeje se posiciona entre los municipios de Canarias como pionera en la materia, con un compromiso que va más allá del mero cumplimiento de la LOPIVI, la Ley Orgánica 8/2021 de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia, al materializar la misma en acciones reales que hacen efectiva dicha protección.

En el acto, presidido por Adolfo Alonso, concejal de Cultura, Educación y Deportes, también participaron el psicopedagogo y responsable de la empresa especializada Bien Hecho, Gonzalo Silió, la Directora del Instituto Internacional de Excelencia y Certificaciones Deportivas María África Álvarez, y la edil adejera con delegación especial en educación y escuela infantil, Coraima Afonso. Todos coincidieron en señalar que la violencia hacia los menores en el deporte y en el ocio es una realidad silenciada, en la que los datos, siendo preocupantes, apenas muestran una mínima parte del problema.

Tal y como explicó Adolfo Alonso, el paso que Adeje está dando en materia de protección es la consecuencia lógica de una gestión comprometida con la calidad y con una visión del deporte más amplia, que ayuda a conformar personas y sociedades más sanas. “Además de trabajar en mejores y variados equipamientos, en impulsar la participación de la infancia, el apoyo a los clubes o la implicación de las familias, nos hemos ocupados activamente en garantizar la cualificación profesional de los monitores y el cultivo permanente de valores en la práctica deportiva” Con este protocolo se busca establecer y promover que la práctica deportiva se desarrolle en un entorno protector, seguro, inclusivo y propicio para el bienestar, donde el buen trato y la erradicación de cualquier forma de violencia sean principios fundamentales en todas las instancias.

“Adeje entiende y cuida a su infancia”, señaló por parte Gonzalo Silió, quién destacó que la violencia es una causa habitual de abandono deportivo en la infancia, señalando que el municipio, con protocolos como el presentado, asume su responsabilidad trabajando para que los menores se encuentren bien, en entorno seguro. En el marco del protocolo, desde septiembre pasado Silió viene dando formación presencial a una veintena de monitores que ejercen el papel de delegados, una preparación que se hará extensible a unos 150 monitores municipales vinculados a las Escuelas Deportivas, Escuela Infantil, Cultura y Escuela de Música. Ello implica que el alcance directo de las medidas superará los 3.000 menores, “una cifra que será mucho mayor cuando se trabaje la implicación de los clubes deportivos y de las propias familias”, apuntó Adolfo Alonso.

En este sentido, María África Álvarez señaló que el trabajo que se realiza en Adeje no es habitual y marca la diferencia, ofreciendo garantías para las familias y los deportistas. “El deporte es una de las mejores herramientas para el desarrollo personal, si se usa bien, impactando de forma positiva en la vida de las personas y con un efecto expansivo en la sociedad” apuntó la experta, quién recordó que Adeje es el único municipio de Canarias con el Sello de Calidad Deportiva, que recibió en enero de este mismo año.

Dicha distinción confluye, y viene a sumarse, a la condición de Adeje desde hace 25 años como Ciudad Educadora, integrada en una “red nacional a la que sólo pertenecen cinco municipios de Canarias”, señaló Coraima Afonso, condición que conlleva el permanente compromiso de trabajar en la educación de todos los habitantes de la ciudad, contando con su propia participación en todo el proceso.