Las Fiestas Patronales de Adeje arrancan con el descendimiento de su patrona canónica, la Virgen de la Encarnación, que a su vez es alcaldesa honoraria y perpetua de la Histórica Villa. Pero si importante es este momento para los adejeros y adejeras más devotos, no lo es menos, la lectura del pregón. La elección de la persona que tendrá el honor de abrir las Fiestas Mayores no se deja al azar pues es importante entretejer el pasado y el presente, hacer visibles y valiosas las experiencias de los adejeros que han vivido las fiestas desde la infancia, que han crecido y desarrollado vidas, profesiones y pasiones al albor de unas fiestas que, por encima de todo, son las fiestas del encuentro.
El pregonero de este año es una persona conocida y muy querida en Adeje, cariñosamente conocido como Don Luciano el médico, efectivamente Luciano Carballo García es médico de profesión, concretamente es especialista en el aparato digestivo. Su familia no es una más, ha dejado impronta en el devenir del pueblo pues muchos recuerdan a su madre, Doña Concha, la maestra, la primera maestra, y a su padre, Don Pepe, el alcalde. Nos acercamos a conocer a Luciano Carballo momentos antes de la lectura del pregón.
¿Cómo se siente formando parte de de estas Fiestas Patronales?
A estas alturas de mi edad, uno ya recibe casi diariamente las llamadas de los amigos, las llamadas de las amigas. Para mí es un gran honor poder realizar el pregón de las Fiestas de Adeje, no solo por haber pensado en mí el señor alcalde que ya es para mí un gran honor, sino que además se hace en un edificio histórico, el Convento que se ha convertido además en un museo sacro y donde se realizan los actos más solemnes de la Villa.
¿Nos puede dar algunos detalles acerca de su carrera profesional como médico?
Es realmente una profesión vocacional. Estuve en la residencia de La Candelaria durante casi 40 años en la especialidad de Digestivo. Me jubilé hace unos años pero uno sigue estudiando por vocación y como una distracción.
¿La carrera le trajo también su propia familia?
Yo me fui a Barcelona a hacer la especialidad de aparato digestivo en el Hospital Clínico y allí encontré una enfermera que nos tiramos los tejos los dos. Me casé en Barcelona, justamente a unos 50 metros del Hospital Clínico donde trabajaba. Y allí nació mi primera hija. Tengo dos hijos, una hija que es médico, que está en Nottingham, en Inglaterra, y un hijo que es farmacéutico que vive en Santa Cruz.
¿Qué recuerdos tiene en su trayectoria en el pueblo y con sus gentes?
Es gente muy buena, muy llana. Conservo bastantes amigos de aquella época y también amigos actuales. Lo que les voy a decir es justamente la base de mi pregón. Es un pregón que yo denomino el pregón de los recuerdos, puesto que la fiesta la disfruté desde los cuatro o cinco años hasta los 19, porque ya a los 19 me fui a la península a estudiar la carrera y me distancié un poco del pueblo. Tiempo después, he seguido viniendo a las fiestas actuales cuando he podido, porque claro, el trabajo lo hacía complicado.
Recuerdo sobre todo cuando tenía más conciencia de lo que era la fiesta, a partir de los siete años, la alegría y los bailes y como disfrutaba la gente en aquellos tiempos. Las Fiestas eran el punto de unión de todo el pueblo, el punto de reunión de todos los barrios no sólo los del casco.
¿Cómo ha visto el desarrollo del pueblo en estos años?
Yo no quiero ser lisonjero, pero es importante tener personas que tengan sensibilidad, que sean amigos del arte, que tengan miras de futuro, porque yo en los años 40 y 50 vi cosas muy desagradables. Los niños venían a la escuela con llagas en las piernas, como decíamos. Yo no pasé por eso, pero sí estoy consciente y lo que no podemos hacer es involucionar, ya que volvemos otra vez a esos tiempos. Las miras que tiene el Ayuntamiento son para aplaudir. Cuando voy por ahí, cuando me preguntan yo digo siempre mire, pruebe y compare para que sean conscientes de lo que ha evolucionado nuestro pueblo.
Su casa está situada en un lugar clave en el casco de Adeje, cerrando la Calle Grande, al lado de la Plaza España ¿qué opinión tiene de la remodelación de este espacio?
Mi casa es lo que llamaban antes la Comandancia. La llamaban la Comandancia porque tras la Guerra Civil Española y la Segunda Guerra Mundial, se alojó allí un regimiento del ejército. Y el mando del ejército estaba en esa casa.
La remodelación de la plaza me gusta mucho. Lo que no entiendo es cómo existen personas que dicen que no les gusta, porque una obra hecha y reconocida mundialmente. Yo creo que esto es posiblemente por envidia. Yo creo que hay que aplaudir, sí, aplaudir las miras de futuro. Hoy Adeje es un pueblo que ha cambiado tremendamente
